Como parte del balance realizado por el foro de Salud Mental se le volvió a reclamar al Estado que respalde una política sustentable para el sector. Asimismo, se recordó que la salud mental es también “una actitud ante la muerte”, que, tal como lo formuló Freud, “implica soportarla, y hacer algo con la vida en una causa común”.
Integrantes de dicho organismo, que trabajarán el año que viene de la misma manera que lo hicieron durante el corriente, coincidieron en señalar que la salud mental no sólo debe ser tenida en cuenta cuando se la pierde, por eso como parte de los “principios”, se está trabajando para que se ratifiquen las políticas públicas y se rectifiquen errores.
“Desde que constituimos el Foro y nuevamente en este Fin de Año, queremos pedir que gobiernen las personas y no las cosas, que significa nada más y nada menos que priorizar lo subjetivo sobre lo material, humanizando las políticas. Por eso, insistimos con la democratización del sistema para que las cosas pasen a las personas, porque sino el malestar y la injusticia se redoblan. Es que la salud mental forma incuestionable parte de los Derechos y, por lo tanto, el Estado debe responder”, se indicó.
Además señalaron que “están en contra de todas aquellas acciones que perpetúen la funesta definición de la salud que dice: la salud es el silencio de los órganos en el cuerpo. Definición que se consolida justamente con la transformación de las personas en cosas, tan presentes en el ideal de gestión de las políticas de Estado en gran parte del mundo”.
Estando muy al tanto de lo que acontece en el vasto campo de la salud mental, el Foro insiste con que las políticas y las acciones distan mucho de estar en un mínimo adecuadas a los requerimientos de la gente. Lo notan en la Nación, la Provincia y lo padece Tandil. Si bien en materia de salud pública, las responsabilidades son compartidas por estas tres instancias gubernamentales, los últimos gobiernos comunales son los que más cargan con las culpas.
Sin embargo, los nuevos movimientos en al área de salud de la comuna dan “optimismo, a la vez que generan expectativa y preocupación”. Al respecto, desde el Foro se explicó que “el año próximo será testigo de la puesta en marcha de lo que suponemos y queremos habrá de ser un autentico e inédito polo de salud mental en Tandil, ya que entre las calles Alem, Uriburu, Paz y Pellegrini, se estará inaugurando el nuevo edificio de internación en salud mental. También podrá llegar a inaugurarse (lo deseamos fervorosamente) el Hospital de Día que construye la Fundación Tandil Para La Salud Mental”.
Por estos movimientos, se han mantenido contactos permanentes con el intendente para hacerle llegar las inquietudes, críticas y propuestas. “En varias oportunidades nos reunimos con su equipo de salud y, con satisfacción ,en más de una ocasión compartimos la necesidad de reconvertir el sector. Acordamos que, tanto aquí como en otras partes, principalmente los médicos por su incomprensión, pero también los psicólogos y los trabajadores sociales, en su gran mayoría, son responsables del patético lugar de furgón de cola que desde hace 25 democráticos años tiene la salud mental en todos los distritos”.
En definitiva, el Foro sostiene: “apostamos a la palabra y al encuentro, es que el nuevo año nos tomará nuevamente comprometidos con la salud pública local, diciéndoles a la gente de Tandil que la salud mental no es una especialidad médica más y que por eso necesita del compromiso de toda la sociedad civil y política, quienes pueden incidir e innovar para lograr hacer más tolerable el sufrimiento y la vida en los duros tiempos que transitamos y ese es nuestro deseo”