Además de las dos semanas de suspensión, una prevista para este mes y otra para diciembre, se conoció que la cúpula de “Metalúrgica Tandil” programa adelantar las vacaciones 15 días, decisión que –como adelantó LA VOZ el sábado último- compromete la situación laboral de más de 200 trabajadores.
Así lo confió ayer Carlos Reyes, secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica, seccional Tandil, para luego reiterar que en la jornada de hoy, en dos turnos, se realizarán asambleas informativas con el personal de la señera empresa de la ciudad.
“Se harán asambleas informativas para que los compañeros se vayan interiorizando del panorama, aunque ya vienen siendo anoticiados por lo que comunicó el cuerpo de delegados”, marcó Reyes.
Luego confirmó las medidas restritivas planeadas por la firma: “adelanto de vacaciones de dos semanas, una semana de suspension de noviembre y otra en diciembre”.
Más tarde reiteró los argumentos de la patronal ya que “tienen stock acumulado y no se justifica seguir produciendo, nos dijeron los empresarios. Si no se abren los mercados, y se retoman los pedidos, esto seguirá complicándose”, aseveró el sindicalista.
También reconoció que la UOM tiene acotado su margen de acción ante situaciones como las de Metalúrgica Tandil, ya que abarca –obviamente- no sólo a Tandil sino a toda la Argentina.
“No hay medidas que podamos llevar a cabo y beneficiar directamente a los trabajadores, lo único es exigir, como ya lo hicimos, que demuestren con papales la existencia real de la caída en la demanda”, añadió Reyes.
Aseguró luego que el problema es coyuntural y atañe a las “altas esferas del Gobierno Nacional, no es sólo Tandil, esto es un granito de arena”.
La comision interna y el cuerpo de delegados de la UOM (Tandil) acelera entonces la ronda de reuniones, mientras crece –dijo Reyes- en el personal de “Metalúrgica Tandil” la sensación de “malestar y disgusto”.
“Se acercan las fiestas de fin de año y el panorama no es nada claro. Esto no sólo afecta a los empleados sino a todos los grupos familiares. Esperemos que esto cambie y comiencen a aparecer los pedidos”, añadió el entrevistado.
“Tandil es un granito de arena, en todo el país vemos que cayeron las ventas en los comercios, y es producto de que se está cayendo a pedazos el sistema productivo”, destacó.
El proceso de deterioro de la economía argentina –observó luego- que “comenzó con el conflicto del campo, y ahora se acentuó con la crisis financiera internacional”.