El segundo mes de 2009 comenzó con un operativo de la Dirección de Tránsito, con apoyo de policías de las seccionales primera y segunda.
Los controles se hicieron entre la medianoche y las 5 de la mañana y de los 165 vehículos detenidos para el examen de alcoholemia, se efectuaron 129 determinaciones, de las cuales 33 resultaron positivas y 11 punitivas.
El director de Tránsito, Mario Montani, reseñó: “labramos 68 actas, secuestramos diez automóviles, nueve motocicletas y ocho licencias de conducir por diversas irregularidades”.
El funcionario explicó que “en principio, el operativo fue para hacer control de alcoholemia, pero a cada vehículo detenido se le hicieron otros exámenes de rutina”.
Fueron motivo de las actas por infracción la falta de extintores de fuego, de comprobante de seguro, de “tarjeta verde” y de VTV; licencias de conducir vencidas o ausentes; exceso de ocupantes; falta de cinturón de seguridad o la omisión de su uso; circular en moto sin casco; giros en “U” y violación de la luz de alto del semáforo; circular sin patente; problemas con las luces reglamentarias.
Además, el funcionario reconoció que hubo en este operativo, como en casi todos los de esta naturaleza, “vecinos que no acatan la orden de los agentes y hasta se ponen violentos cuando son confrontados con la realidad de que están cometiendo alguna infracción”.
Finalmente, Montani aseguró que seguirán los controles de este tipo buscando “sembrar conciencia en los conductores y en la población en general sobre la urgencia de empezar a cumplir las normas establecidas, que es la única manera de convivir en armonía en una ciudad con un parque automotor descomunal”.