En medio de la sequía histórica, que no conoce precedentes en los últimos 20 años, la lluvia -con tormenta incluida- que cayó en las últimas horas del lunes y las primeras de ayer trajeron un nuevo alivio al sector agropecuario, aunque –claro está- lejos está de modificar en forma sustantiva la situación de emergencia que atraviesan los productores.
LA VOZ consultó a voceros de la Sexta Brigada Aérea, donde se detectó la caída de 9 milímetros.
Por su parte, desde la Sociedad Rural (calle Santamarina), registraron 20 milímetros, cifra que otorga un panorama a lo ocurrido en el centro de Tandil.
Mientras tanto, dirigentes ruralistas avanzaban en recolectar información al detalle sobre lo que sucedió en el partido y localidades dedicadas a ese rubro de la economía castigado por las inclemencias del tiempo.
El mayor Gustavo Czof, miembro del servicio de Pronósticos de la Base Aérea, agregó luego que el agua podría regresar mañana en horario matinal, y si bien podría repetirse la tormenta, no se avizora una inestabilidad que haga prever un panorama similar al de la víspera.
Cabe recordar que el último 25 de enero (domingo) cayeron en el distrito 14 milímetros, aunque en algunos sectores ese número fue superior.
Ayer el ministro de Asuntos Agrarios de la Provincia, en tanto, aclaró que las lluvias registradas en las últimas horas no afecta la próxima declaración del estado de emergencia agropecuaria en la provincia por sequía.
“Aunque llovió en casi toda la Provincia, eso no modifica la declaración de emergencia agropecuaria en todo el territorio bonaerense”, señaló Monzó, quien continúa recorriendo la Provincia para otorgar subsidios a los productores afectados.
El decreto que instaura esta condición de urgencia en los campos fue firmado por el gobernador Daniel Scioli y el ministro Monzó aclaró las distintas instancias que se deben considerar para declarar la emergencia a nivel provincial.
El titular de la cartera agraria detalló que la emergencia se declara en 3 instancias; la primera es de manera individual, campo por campo y distrito por distrito según la condición de gravedad que presenten y se eleva el pedido a la Mesa de Emergencia Agropecuaria local.
“Esta declaración depende de los datos que presenten los estudios realizados por técnicos agrónomos y profesionales del INTA que los avalen, entonces en base a pruebas objetivas se solicita a la Provincia que declare la emergencia o desastre”, refirió el funcionario.