El martes por la tarde en la sede local de la Confederación General del Trabajo, Regional Tandil, se llevó a cabo un plenario de secretario generales. En la oportunidad se analizó la situación que atraviesan varias industrias debido a la crisis y, entre otras cosas, se resolvió declarar el “estado de alerta y movilización permanente”.
La reunión estuvo encabezada por el titular regional de la CGT en nuestra ciudad, el secretario general de AOMA, Marcelo Marcovich, y protagonizada por una veintena de gremios de la ciudad. Entre otros, se pudo observar la presencia de Asimra, Smata, Asociación Bancaria, UTA, gastronómicos, UOM, madereros y empleados de comercio, entre otros.
La medida se adoptó “en total apoyo a los gremios que se encuentran en conflicto por las medidas que están adoptando los empresarios”. Pero además, se aclaró que dicen “no” a los despidos y “si” a la conformación de mesas de diálogo en la que participen todos los sectores involucrados ya sea políticos, empresarios y gremialistas.
En diálogo con LA VOZ, Marcelo Marcovich, señaló que se escuchó cuál es la realidad de cada uno de los gremios que conforman la CGT y, en dicho marco, fue que se resolvió adoptar distintas medidas para evitar que algún empresario “aproveche” el momento para despedir gente.
Por otra parte, en la reunión realizada en la antevíspera que duró más de tres horas, se volvió a hacer hincapié en la necesidad de contar con la “solidaridad” de muchos empresarios con el fin de evitar que se produzcan “despidos masivos”. En tal sentido, se instó a “hacer memoria” porque en los últimos años el crecimiento que han tenido muchas industrias fue muy importante.
Con respecto a la situación que atraviesan muchos gremios, se conversó sobre lo que está sucediendo en una de las metalúrgicas más importantes de la ciudad en donde se habla que gran cantidad de trabajadores tendrían su situación complicada con suspensiones y el adelantamiento de las vacaciones incluido.
Si bien la construcción, madereros y Asimra se encuentran en un momento delicado también, existe cautela ya que no se sabe con exactitud lo que puede llegar a pasar en los próximos meses. De todas maneras, se pronostica que el año que viene “será muy duro” y por eso se espera la intervención del Estado municipal, provincial y Nacional para paliar la situación.
Con respecto a lo que sucede en distintas empresas de nuestra ciudad, se habría manifestado que muchas de ellas tienen stock acumulado y no se justificaría seguir produciendo. Por eso, si no se abren los mercados y se retoman los pedidos, todo indica que el panorama se agravaría.
Si la crisis resiente la actividad no habría medida que se pueda llevar a cabo para beneficiar directamente a los trabajadores. Por eso, llegado ese momento, lo que se va a hacer es que las empresas demuestren con papales la existencia real de la caída en la demanda y, en dicho marco, el estado de alerta y movilización decretado por la CGT es algo muy importante.
Por último, se agregó que la crisis se comienza a sentir y en algunos casos de manera muy fuerte. El sector exportador está muy complicado con el tipo de cambio, prácticamente no tiene rentabilidad. Desde el 2002 hasta la fecha que el dólar tiene el mismo valor y en el medio se registraron aumentos que quitaron rentabilidad. Hay industrias que han suspendido horas extras y redujeron jornadas.