Un nuevo arranque del TC trae aparejado una serie de novedades, como siempre lo hace tras más de 70 años de vida, igual sigue siendo el motivador de grandes pasiones.
Para todos los pilotos “el” objetivo será ocupar una de las 12 plazas que dirimirán el campeonato en las últimas 5 fechas, aunque lógicamente las primeras 11 serán decisivas.
A menos de una semana del inicio en Mar de Ajó, las contradicciones han sido notorias entre lo que manifiesta Oscar Aventin, el titular de la ACTC, quien sostiene que esa institución le pasará una vez “por arriba” a la crisis y lo que sucede con el contexto que acompaña a la difícil situación que se antepone y mantiene preocupados a pilotos, propietarios de equipos y patrocinantes a la hora de solventar los gastos.
En lo referente al tema técnico se hicieron algunos retoques que en los papeles previos favorecerían a los Torino y los Dodge, pero el más significativo será la quita de 3/10 de compresión a los Chevrolet y los motoristas del “chivo” están que trinan.
A los “Toros” se les permitió modificar las suspensiones delanteras, también quedaron habilitados para 30 milímetros el eje delantero e inclinar la parrilla superior hasta 8 grados.
En cuanto a los Dodge, le subieron 20 milímetros el anclaje de la parrilla inferior. En lo referente al peso, los Ford, los Chevrolet y los Torino deberán pesar como mínimo 1.280 kilos, en cambio a los Dodge se le deberán agregar 20 kilos más.
El tema lastre comprende que por cada victoria obtenida se deben sumar 20 kilos, de ganar una segunda se le suman otros 2, en caso de una tercera irá con 70 kilos y si suma una cuarta el peso será de 100 kilos.
En el tema carburadores, a partir de esta temporada sólo se podrán usar los Weber 48-48, pero aquí la ACTC se reserva el derecho de que en caso de que un auto se “escape” puede llegar a reducir el diámetro de los difusores.
También habrá algunos ajustes en el tema de las ruedas, más que nada para asegurar un no deseado desprendimiento y en lo referente a la seguridad ahora los autos contarán con un espacio libre en el lado izquierdo del habitáculo para la extracción del piloto en caso de accidente.
Por su parte, las puertas no podrán quitarse directamente ya que contarán con un seguro que no permitirá desprendimientos.