Miriam Graciela González días atrás perdió casi todo como consecuencia de un incendio que afectó gran parte de su vivienda. Por estas horas necesita la ayuda de toda la comunidad, ya que con solo los 200 pesos que recibe de su plan social debe alimentar a sus cuatro hijos y, además, reponer lo que el fuego destruyó.
A horas de ver como la llamas destruían gran parte del hogar en donde vive con sus hijos, Miriam González se pregunta: “¿ahora cómo se sigue?”. Con su casa aun con los efectos en las paredes del humo, busca respuestas que la ayuden a continuar junto a sus cuatro hijos – uno de los cuáles tiene síndrome de down y otra padece esquizofrenia –.
Como se informó, el miércoles por la mañana, a raíz de un corto circuito se incendió parte de la casa ubicada en el barrio 17 de Agosto. A la hora de iniciarse el siniestro dentro de la vivienda había dos menores, quienes corrieron a alertar a los vecinos sobre la presencia del fuego en una de las habitaciones.
El hecho se inició pasadas las 9.30, cuando un llamado al Cuartel de Bomberos alertaba sobre lo que estaba sucediendo en la casa 135 del pasaje Mercedes de San Martín. De manera inmediata acudieron al lugar dos autobombas y un número importante de efectivos, quienes estuvieron a cargo del subteniente Luis Orellano.
Si bien no se registraron heridos, el fuego destruyó totalmente la pieza que da a la parte del frente del inmueble. Las llamas causaron la destrucción total de todo el mobiliario que estaban en el interior de la habitación siniestrada, como así también de la ropa y distintos elementos que se encontraban en el placard. Además, el intenso calor y humo generó que el cielo raso de una de las habitaciones contiguas quedara totalmente destruido, dejando como saldo la casa toda afectada.

Ayuda
Ayer por la mañana, Miriam González aun estaba tratando de acondicionar un poco su vivienda, ya que el fuego causó severos daños. Mientras aguarda que le llegue la ayuda desde Bienestar Social para reparar las paredes y lo techos, como así también la pintura para las paredes, busca entre sus cosas rescatar lo poco que se salvó del fuego.
Los efectos del siniestros están reflejados en el interior del container ubicado en la puerta de la casa, en donde se pueden ver muebles, ropa, juguetes y electrodomésticos, entre otros, destruidos totalmente por el fuego.
Miriam le venía dando batalla a la vida mucho antes del fuego, ya que con un plan Más Vida, cuya remuneración es de 250 pesos, debe criar a sus cuatro hijos. Todo de ellos menores de edad.
Por todo eso, si ya se le hacía difícil mantener la familia, a tal punto que en más de una oportunidad debió hacer “changas” para poder hacerlo, con el daño generado por el fuego la situación aun es más compleja.
Desde toda clase de muebles para una habitación, hasta ropa de cama, prendas de vestir o materiales para reparar su vivienda, son los elementos que necesita de la solidaridad de la gente para poder recuperar su hogar lo antes posible.
Los interesados en colaborar lo pueden hacer acercando las donaciones en el propio hogar siniestrado. Es decir, a la casa 135 del pasaje Mercedes de San Martín, ubicado en el barrio 17 de Agosto.