La derrota electoral del 22 de octubre convirtió a "Cambiemos", que ganó las elecciones con un 40 por ciento, en primera minoría, y acelera las reformas que ya venía realizando.
Creen tener un cheque en blanco para avanzar sobre derechos laborales y previsionales. Además de todas las penurias de estos dos años para las/os más humildes, como los tarifazos y la inflación. Sumamos a esto el alto nivel de endeudamiento externo que embarga, sin lugar a dudas, el futuro de la Patria.
En este marco se nos presenta ahora por calendario electoral una elección de autoridades en el Partido Justicialista en la Provincia de Buenos Aires, como así también en nuestra ciudad.
Mientras se hace la convocatoria para definir quién presidirá los destinos del Justicialismo local, Tandil está a punto de perder a su empresa más emblemática, Metalúrgica Tandil, además de que muchas/os compañeras/os sufren la informalidad, han sido despedidos o suspendidos, o se encuentran excluidas/os del mercado del trabajo.
Por todos estos temas, creemos que el Peronismo en su conjunto tiene que asumir con madurez esta etapa y hacer un gran esfuerzo para lograr consensuar una lista única, que esté compuesta por todos los sectores del Peronismo, dejando de lado sectarismo, vanidades y discusiones menores.
En caso de que esto no se logre, el Movimiento Evita ratifica que no participará de ninguna lista si no hay un acuerdo de unidad y rechaza totalmente la realización de una interna que demandará esfuerzo, gastos y movilización, mientras las y los trabajadores, humildes y más necesitados, aguardan de la dirigencia un abordaje de las demandas sociales que esté a la altura de las circunstancias y que exprese una alternativa política de futuro, tendiente a transformar la realidad social en beneficio de la mayoría del pueblo.
Vamos a seguir reconstruyendo el Peronismo en cada barrio, en cada fábrica, en cada unidad productiva de la economía popular, en cada espacio educativo. Con las mujeres, con los trabajadores y la juventud.