Un 57% de los franceses tiene una mala opinión del presidente Emmanuel

Macron, la cifra más elevada desde que llegó al poder en 2017, según un

sondeo divulgado hoy en medio de crecientes protestas sociales contra su

política, que van a continuar en abril.

El instituto demoscópico BVA indicó en una encuesta mensual encargada por

el diario La Tribune y la radio RTL que la impopularidad de Macron ha

aumentado cuatro puntos desde febrero.

Sólo un 40% de las personas consultadas -tres puntos menos que en febrero-

tiene una buena opinión del jefe de Estado, que ayer enfrentó una huelga y

la mayor protesta sindical contra sus reformas liberales en los 10 meses

que lleva en la Presidencia.

Cuando llegó al Elíseo, en mayo de 2017, un 35% de los franceses tenía una

mala imagen del joven político, de 40 años, y un 62% buena, reportó la

agencia de noticias EFE.

La constatación de este deterioro llega un día después de la que aparece

como la mayor movilización en la calle contra su política, convocada por

los sindicatos de funcionarios y de la compañía estatal de ferrocarriles

SNCF.

Según la Confederación General del Trabajo (CGT), 482.000 personas

participaron en las manifestaciones organizadas por todo el país, una cifra

superior a las 400.000 que el sindicato había dado en una precedente

jornada de protesta en octubre.

La policía, por su parte, estimó que los manifestantes ayer fueron 323.000

en todo el país.

La CGT pretende llevar a cabo una nueva jornada de movilizaciones el 19 de

abril para sacar otra vez a la calle a los opositores a Macron y obligar a

suspender algunas de sus principales reformas, como la que afecta a los

trabajadores de la SNCF.

De hecho, el principal desafío ahora para el gobernante es la serie de 36

días de huelga en los ferrocarriles entre abril y junio -dos días de cada

cinco- convocada por cuatro sindicatos mayoritarios de la SNCF, que quieren

que renuncie al fin de su estatuto laboral, que incluye notables ventajas

respecto al régimen general.