La semana pasada, en el Concejo Deliberante, se aprobó el cambio de sentido de circulación de calle Larrea y aledañas, en la zona de El Cerrito. En ese sentido, el edil Facundo Llano, del Bloque Justicialista, votó por la negativa y aseguró que "no tiene razón de ser".

En diálogo con La Voz, el concejal Llano explicó que "nosotros debemos tener una decisión de gestión, producto de una planificación urbana, y esa planificación hay que definirla conforme la movilidad, la información y la estadística que se tenga".

"El departamento Ejecutivo, desde la Secretaría de Obras Públicas, solicitó a la Nación hacer la calle Larrea, que quedó muy bien, muy linda, que tiene muy pocos frentistas, pero la solicitó para que sea la redistribución en conjunto con la obra que se está haciendo en Avenida Fleming, el distribuidor ", agregó.

El edil graficó que "entonces, de Fleming, los vehículos iban por Larrea hasta Bolívar e ingresaban a la ciudad tranquilamente. Ese flujo vehicular, se solucionaba. Ese pedido fue hace 4 meses y el Concejo lo resolvió de esa manera. Ayer, por propuesta nuevamente del Ejecutivo y con el acompañamiento del oficialismo se cambia el sentido de circulación de esa calle y de otras, en contraposición con el gasto que se hizo en la obra, con la planificación que había hecho el Ejecutivo, con lo que para los vecinos podría haber sido más útil. La razonabilidad indica tomar Fleming, Larrea, Bolívar y listo".

Según Llano, "el por qué del cambio y en qué mejora, no lo pudieron sostener técnicamente. El argumento es que de acuerdo como había sido determinado por el Ejecutivo, generaba conflicto en algunos vecinos de la zona para la distribución vehicular, que puede ser que haya que contemplarlo, pero la política pública hay que definirla con inteligencia, porque hace al uso de los recursos. Larrea costó mucho dinero, como va a costar Fleming, para después mandarlos a los vecinos, a doblar a la izquierda por Lobería, después meterse por Fugl, en el Falucho, realmente no tiene rezón de ser".

El concejal aclaró que no apunta a que haya sido dinero malgastado "porque la obra está", pero consideró que con los cambios de circulación, "no responde a una política pública pensada de forma estratégica".

"En Tandil hay mucha demanda de asfalto, para lograr el financiamiento de obras que no van a ser utilizadas correctamente", opinó.