El conflicto se desató cuando la compañía impidió el ingreso a un grupo de 20 empleados que se negaron a firmar los papeles que los obligaban a trabajar 48 horas semanales, cuando el convenio de Camioneros es de 44.

Desde la madrugada, delegados y representantes del gremio que lideran Hugo y Pablo Moyano se hicieron presentes en el lugar y se declararon en estado alerta y asamblea permanente hasta que los representantes de la empresa les dieran una respuesta.

Oscar Borda, representante de la rama de logística del sindicato, exigió el cumplimiento del convenio de trabajo que alcanza al sector, y rechazó la medida que quiere adoptar la compañía porque consideró que se trata de un paso para avanzar en la reforma laboral.

"Esto excede todos los límites. Hay un abuso total de parte de los supervisores y de la gente de gerencia. No puede ser que nos quieran pasar por encima, y después, por manifestarnos, amenacen con sancionar y suspender compañeros", apuntó el dirigente.

Desde el gremio adelantaron que la protesta continuará "todo el tiempo que sea necesario" hasta que les den una respuesta y apuntaron al Gobierno: "Estos son los empresarios que responden al presidente Mauricio Macri. Y sabemos que este señor acomoda todo al servicio del capital".