Los ejecutivos de Netflix deben estar lamentándose de que el reciente estreno de su película "Los dos Papas'' los privó de que dicho filme seguramente incluyera un pasaje de alto impacto basado en la última polémica que estalló en el Vaticano tras la aparición de un libro que lleva la firma de Benedicto XVI y califica al celibato sacerdotal de "indispensable''. Hasta aquí no parecería un condimento demasiado atractivo para ningún guión, pero las posteriores acusaciones, desmentidas, reclamos y aclaraciones que aquí se detallan harían más taquillera cualquier obra cinematográfica:­

* El periódico parisino Le Figaró publicó el pasado domingo extractos de Desde el profundo de nuestro corazón, cuya tapa anuncia como autores al Pontífice emérito y al cardenal guineano Robert Sarah, prefecto de la Congregación del Culto Divino y habitual crítico de ciertas posiciones doctrinarias de Francisco. En el texto, defienden a ultranza el celibato, un pensamiento que no debería llamar demasiado la atención salvo por el "pequeño gran'' detalle del momento elegido para que este volumen salga a la venta (hoy lo hará en Francia y el mes próximo, en Estados Unidos), justo en la antesala de que Bergoglio se expida sobre la ordenación como curas en la Amazonia de hombres casados a los efectos de cubrir la escasez de sacerdotes en esa vasta región, una de las solicitudes planteada por el Sínodo de Obispos celebrado en octubre de 2019.­

* El libro cayó como una bomba en el Vaticano, donde reactivó la pelea entre el sector conservador y los representantes del ala progresista, quienes vieron en esas páginas un intento del Vicario de Cristo "jubilado'' de presionar al actual en el ríspido tema. La discusión fue escalando de tal forma que cada bando empezó a mover sus alfiles en esta sorda batalla que se libra en la cúpula de la curia. Así, diversos diarios, entre ellos el Corriere della Sera, filtraron la versión de una fuente anónima cercana a Ratzinger según la cual el Papa alemán "no ha escrito esa obra a 4 manos'' y, además, adjudicaron el conflicto a "una operación editorial mediática de la que él no desea formar parte y es totalmente ajeno''. Otros fueron todavía más allá al señalar que "miembros del séquito derechista manipularon y se abusaron de su frágil estado de salud para divulgar este escrito que equivale a un ataque frontal a su sucesor''.­

* Con la discusión cada vez más caliente, entró en escena el histórico secretario y persona de máxima confianza de Benedicto, el arzobispo Georg Gaenswein, quien admitió ayer que si bien su jefe le mandó a Sarah un texto sobre el celibato y que el purpurado africano planeaba abordar el asunto en un libro, "jamás aprobó que figurara como coautor ni vio o autorizó la tapa'', por lo cual urgió al otro protagonista de esta controversia a exigirle a los editores que retiraran la rúbrica de Ratzinger. "Fue un malentendido, sin poner en duda la buena fe de Sarah'', buscó no echarle más leña al fuego, pero no lo logró.­

* Lejos de quedarse callado, el cardenal guineano replicó con duras palabras y también con "pruebas'', ya que difundió 3 cartas que le envió Benedicto y dejan en claro que "él sabía todo''. En ese sentido, recordó: "Le manifesté que lo mejor era divulgarlo en este formato dado lo difícil que sería hacerlo en los medios de comunicación. El 25 de noviembre pudo ver la obra concluida y la portada. Me autorizó a publicarlo de la manera que tenía previsto y el 3 de diciembre, cuando lo visité en su residencia Mater Ecclesiae, le avisé la fecha de salida''. ­

* "Estas difamaciones son excepcionalmente graves y la polémica desatada, profundamente despreciable'', tuiteó en respuesta a la prensa aunque al final recobró el espíritu eclesiástico y perdonó, "sinceramente, a todos aquellos que me calumnian o quieren ponerme en contra de Francisco, a quien le ratifico mi absoluta obediencia filial''.­

* "Considerando las controversias provocadas, en las futuras ediciones el autor será el cardenal Sarah, con la contribución de Benedicto XVI, mientras que el resto de los textos permanecerán igual'', procuró cerra la grieta. Sin embargo, el editor en inglés, Ignatius Press, dijo que publicará el libro en la fecha prevista con la doble firma.­