13 de febrero de 2020
Mientras se desarrolla el juicio oral por las irregularidades cometidas por el fallecido concesionario del Hipódromo de Tandil, que según la causa contó con colaboración de los ex miembros del gabinete lunghista Guillermo Alasia (Vialidad) y Pedro Espondaburu (Desarrollo Local), el autor de la denuncia que llevó un derrotero de 9 años, Jorge Cuenca, dialogó con LA VOZ y puso un punto de interrogación sobre la sentencia: "con el poder judicial nunca se sabe".
Primero el cuidador de caballos observó que Jorge Dames, letrado asesor de los imputados, está desarrollando una "defensa muy pobre y endeble, por más que tenga una amplia trayectoria".
"Se basan en que no le corresponde al municipio, cuando el que hizo el contrato como licenciatario es el intendente Miguel Lunghi con Emiliano Daniel Blanco", destacó.
Más tarde Cuenca enfatizó en la "contundencia en las testimoniales que citó el fiscal, y más allá de mis diferencias, confío plenamente" en Marcos Eguzquiza.
"Soy de los que defienden con los genitales lo que se dice con las cuerdas vocales", profirió en otro tramo de la nota.
Y recordó que "cuando reabrió el hipódromo empezó el caos, la mentira, la traición, la cobardía. El porcentaje de entradas que iba para el Hospital Santamarina era un 10 %, cuando se cortaron 26.754 entradas, y rindieron por 4.593 entradas".
"El intendente dijo en la interpelación que él pidió que dejen de cobrar a las 16 horas, a quién le dijo, si el encargado era yo", se preguntó Cuenca.
También consideró que "en el banquillo de los acusados, primero debe estar Miguel Angel Lunghi, el que siempre firmó y negó absolutamente todo, nunca quiso escuchar".
Consultado sobre lo que espera de la sentencia, contestó: "con el poder judicial nunca se sabe, demuestren ahora que controlan, porque hasta ahora no controlaron a este Ejecutivo".
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"No bajo los brazos"