Luego de cumplir con sus tareas laborales, en el club Uncas, una tarde al llegar a su casa Marcelo "Negro" Gómez sintió un cansancio corporal, sumados a otros pequeños indicios, que lo hicieron sospechar que algo no estaba bien. Con el correr de los días continuaron los dolores hasta que habló con su médico y un sábado ingresaría a la guardia del Sanatorio Tandil, como caso sospechoso de coronavirus.

Horas más tarde le confirmarían el positivo y allí arrancaría una estadía de ocho días en el centro de salud ubicado en el centro de la ciudad. "Al principio me aislé, tuve algo de fiebre con 37º5 y dolor de cuerpo. Al tercer día la fiebre fue subiendo y comenzaron los dolores de espalda. Pase varios días en cama y hasta que un sábado, al contar con signos de cansancio y fiebre, me fui para el Sanatorio", le empieza diciendo a LA VOZ Marcelo Gómez, mientras supervisa los entrenamientos de su escuela de tenis que funciona en el club Uncas.

Con mucho dolor de espalda, sumado a que no contaba con la capacidad de oxígeno que tiene actualmente para respirar, el entrenador se dirigió al centro de salud y, luego de narrar cuales eran sus síntomas, se sometió al hisopado y le realizaron todos los estudios. "Me pusieron oxígeno y ya enseguida me empecé a sentir un poco mejor y me llevaron a una habitación para que luego me trasladaran a terapia intermedia en donde estuve un tiempo. Los primeros días tuve fiebre y de a poco fui mejorando".

Sorprende un poco su caso, ya que se trata de una persona joven y sana que nunca había tenido enfermedades y de repente se encontró luchando por su vida...

Uno a veces cree que no le va a tocar. Soy una persona fuerte y que me considero sano y que no he tenido enfermedades. Sin embargo me pegó de una manera muy dura y la pase muy feo internado; no se lo recomiendo a nadie y solamente les digo que se cuiden.

¿Fueron los primeros días los más difíciles de su internación?

Pase dos días en los que sentía que me moría, ya que estaba con mucha fiebre, dolor de cuerpo y un decaimiento total. No tenía fuerza pero de a poco con el correr de los días fue evolucionando. Fue muy duro todo lo que me tocó vivir. La pasé pésimo y la cabeza te trabaja a dos mil kilómetros por hora y pensás que no la contás. No es una simple gripe que llega y se te pasa. A mi me tocó algo muy duro y se de muchas personas sanas que también la pasaron.

Con ese panorama que describe y estando solo, ¿en que se aferraba para tener fuerza y lograr su recuperación?

Estaba solo y el personal de la salud entraba solamente cuando era necesario. Una vez al día veía a alguna persona que te alentaba y te decía que ibas a mejorar. Estar 24 horas solo es lo peor del virus. Por suerte, estaba comunicado con los más cercanos mediante el celular pero tampoco quería mucho que la gente se enterara.

¿De qué manera manejaba los miedos e inseguridades que genera el coronavirus?

Sinceramente los médicos, enfermeras y terapistas te ayudan mucho a estar bien pero es muy complicado estar solo y no poder contar con el afecto y el cariño de la familia y los amigos.

¿También se le cruzaba por la cabeza que quizás usted había podido contagiar a otras personas?

Sentir que podes contagiar a alguien y que podes lastimar a otra persona es muy duro. Lo mismo que te pasa a vos lo puede vivir otro. Es un virus muy malo y todos los que están cerca tuyo pueden contagiarse.

En lo emocional, ¿como fue viviendo esos ochos días internado y sin saber cuando podría recibir el alta?

La cabeza trabaja mucho y eso no te ayuda pero cuando vas sintiéndote mejor ya cambia la situación. Me replanteé muchas durante la internación. Creo que es clave que la gente pueda tomar conciencia de que este virus es muy complejo. Tenes mucho tiempo para pensar ya que estas solo. Al principio queres dormir y tratar de estar mejor.

Después de todo lo que vivió, ¿su idea es poder donar plasma para colaborar con otras personas?

Voy a tratar de donar plasma para poder ayudar a la gente que lo necesite. Hay que cuidarse mucho y esto no es sencillo pero depende como nos cuidemos. Las personas deben entender que el barbijo llegó para quedarse y es fundamental su uso hasta que no este la vacuna.

Hace poco volvió a dar clases, ¿cómo fue el regreso después de haber tenido coronavirus?

En mi caso particular estuve varios días guardado antes de volver a trabajar ya que me sentía muy cansado. Por suerte ya me encuentro muy bien pero volví con la idea de cuidar a los demás. Salvo en mi casa, el barbijo no me lo saco para nada. Trato de hablar mucho con los chicos y sus padres para contarle mi experiencia y decirles que se cuiden mucho.

Después de lo que vivió, ¿ahora le toca hacer más docencia que antes?

Les pido que usen el barbijo, que se laven las manos, que mantengan distancia y que usen alcohol en gel. Eso es muy importante todo eso ya que vamos a vivir mucho tiempo con todo esto y es fundamental que puedan cumplir con todas esas normas.

SU MENSAJE PARA LOS JÓVENES Y ADOLESCENTES

"Ellos quizás son por ahí los que pueden llegar el virus a la casa de sus padres y afectar a sus seres más queridos. Se tienen que cuidar cuando andan por la calle. Nosotros acá en el club seguimos un protocolo estricto para poder continuar con la actividad", detalló Marcelo Gómez.

EL CORONAVIRUS EN TANDIL

El entrenador de tenis también se refirió a la situación que vive la ciudad con respecto a la pandemia y señaló que "es preocupante pero es algo que esta y deberemos aprender a convivir con el. Se lo combate con prevención y estar pendiente de lo que dice el sistema de salud de la Municipalidad. Hay que cuidarse mucho y todos debemos tomar conciencia que la situación es más grave de lo que es".

EL AFECTO VIRTUAL QUE RECIBIÓ DURANTE SU INTERNACIÓN

Marcelo Gómez optó por comunicar lo que le estaba sucediendo solamente a su familia y seres más cercanos aunque con el correr de los días internado le fueron llegando muchas muestras de afecto que hoy agradece. "La gente conocida y cercana me mandaba mensajes de apoyo y de fuerza que fueron muy importantes cuando estaba solo en una habitación. Realmente todo eso fue gratificante y te ayuda un montón. Le recomiendo a la gente que cuando tenga algún pequeño síntoma le avise a su médico y se aísle. Es importante siempre avisar e informarle a las personas que estuvieron cerca de uno para que estén al tanto y se pueda cuidar".

AGRADECIMIENTO PARA EL PERSONAL DE LA SALUD

En un tramo de la charla con este medio, el reconocido entrenador tuvo palabras de agradecimiento para todo el personal del Sanatorio. "Sinceramente quiero agradecerle a las enfermeras, terapistas y médicos por el trabajo que hicieron. Me atendieron muy bien, como lo hacen con todas las personas que estaban internadas".