Explosiones, picadas y ruidos molestos. Vecinos de av. Bolívar sobre las motos a la madrugada: "se están tomando pastillas para dormir"

Las detonaciones en las madrugadas de Tandil, sobre todo durante los fines de semana largo, parecen superar los límites de la zona del Parque Independencia y el Lago del Fuerte, ya que la caravana de motos, en las noche silenciosa, deja su estela sonora por casi todos los barrios.

Ayer la vecina Ruth Henderson manifestó su hartazgo y ante la nota de LA VOZ DE TANDIL vecinos de la avenida Bolívar se comunicaron con esta Redacción para sumar detalles de lo que significó la última semana (Viernes Feriado- Día de la Bandera), en particular, y lo que es vox populi: un problema de años en la ciudad.

"Parece una ametralladora, hay vecinos que toman pastillas para poder dormir, me extraña que un intendente médico no esté viendo las consecuencias de las explosiones en la salud de la población", marcó una de la ciudadanas que pidió reserva de identidad.

"Es el dique, Uncas, Cerrito, Brasil, Avellaneda, conozco casos de turistas que vienen a descansar a Tandil, en cabañas o cerca del lago, y no pueden dormir, entonces no vienen más", se quejó otra de las voces para sintetizar: "Tandil perdió el encanto del silencio".

También observan que "las casas pierden valor, nadie quiere una casa por ahí", en relación a las zonas por donde pasan las motos en fila.

Sobre el último finde, detallaron: "miércoles, jueves, viernes y sábado, los cuatro días, por los menos hasta 4.30 AM se escuchaban. Somos adultos mayores y en casa nos cambiamos de habitación, porque la que da al frente no se puede descansar, pero en la que estamos ahora tampoco".

Otro de los aspectos perniciosos afecta en especial a los geriátricos, las mascotas que se alteran ante las detonaciones de los ciclomotores, y las personas con trastornos del espectro autista.

"Llamás al 101 y te dicen que hay que llamar a la Municipalidad. Nadie se hace cargo", lamentó la contribuyente.