Elián Chali y las obras pictóricas en calle Belgrano: "La idea es generar un tríptico entre los tres edificios"

LA VOZ DE TANDIL dialogó con el artista sobre el proyecto que se está generando en la ciudad, y que nutren de belleza y color el área en la que confluyen los edificios de Mulen y ambos Nexus.

-L.V.: Elián, tus obras tienen una particularidad muy especial, conocemos justamente la que está en una de las paredes del Mulen que da sobre calle Belgrano. Bueno, ahora volvés aquí a Tandil a trabajar, ¿Por qué en nuestra ciudad nuevamente?

-E.C.: Bueno, buena pregunta, eso se lo deberíamos preguntar al grupo Faro Verde, pero me parece que un poco por la relación que comenzó en el 2020, cuando me invitaron a intervenir en el lateral del edificio (Hotel Mulen), había ganas de continuar las intervenciones, y con estos dos edificios proyectados al costado quedaría el tríptico de las tres obras en conjunto que se puede observar desde Santamarina y Belgrano.

-L.V.: ¿Y qué es lo que tenías pensado?

-E.C.: Tengo diferentes formas de trabajo. Particularmente, me parece que las obras tienen una relación importante con la plaza; y por otro lado, el alto de los edificios que se elevan, se alzan, y en la zona no hay muchos edificios altos, entonces es trabajar o articular con esa particularidad que hace al paisaje urbano más allá de mi obra, de decir, bueno, hay unos edificios altos, ¿Qué es lo que va a suceder en esto? ¿Son grandes módulos geométricos? ¿Estos bloques son solamente edificios o pueden ser también soportes de arte? A partir de eso pensamos la idea de que el tríptico, las tres obras en conjunto, pueden llegar a articular muy bien con el contexto.

-L.V.: ¿La elección de los colores cómo es?

-E.C.: Yo trabajo con un programa estético-visual estricto hace ya varios años, y un poco llegué a ese nivel de síntesis. Luego de trabajar mucho en el espacio público, a la hora de salir a intervenir en diferentes lugares del mundo, poder ir con un lenguaje lo suficientemente básico, casi rudimentario, para poder articular con los distintos contextos. Más que adaptarme, yo voy con una propuesta, como en una conversación, uno va con una postura, y la contraparte hace el resto. En ese sentido, me gusta señalar que mi obra hace una parte del trabajo, y que la arquitectura hace otro, el contexto sociopolítico hace otro, la geolocalización en el mundo hace otro. La obra se compone de todos esos factores también.

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-L.V.: ¿Cuántos años hace que estás con este tipo de trabajo? ¿Cómo te transformaste en un artista que lleva adelante este tipo de obras?

-E.C.: ¿Cómo me transformé en un artista? ¡Qué pregunta más compleja! No puedo responder a esa, pero sí te puedo contar que realizo proyectos de gran envergadura en el espacio público, más o menos desde el 2010, o 2012, alrededor del mundo, sobre todo. Actualmente tengo 36 años y mi interés en el arte comenzó como a los 16, cuando era pibe e iba a la secundaria, y bueno, con el tiempo se fue como modificando, ¿no? Fue creciendo, se fue transformando en un cuerpo de obra, una carrera, una profesión.

-L.V.: Hablabas de obras que tenés alrededor del mundo, en muchos lados.

-E.C.: Sí, tengo varias en Alemania, en Colonia, en Berlín, en Hamburgo, en varias ciudades de Alemania he trabajado. Generalmente trabajo en el espacio público, por lo menos la parte de pintura. Yo tengo otras líneas de producción artística como la fotografía, también escribo, soy investigador, hago diversas cosas, pero la parte de obra pictórica y en el espacio público, es la que he realizado alrededor del mundo. En Alemania he trabajado muchas veces, también en Italia, mucho en España, en Estados Unidos, Australia, Rusia, no sé, te puedo nombrar varios, pero bueno, son más de 30 países recorridos en estos años.

-L.V.: ¿Cómo es tu equipo de trabajo?

-E.C.: Ahora también vine con tres compañeros, que son amigos míos, Mariano, Luciana y Simón. Cuando puedo viajo con algunos de ellos, dependiendo del proyecto, dependiendo de dónde voy después, o de dónde vengo. Sino trabajo con gente local, con la que ya he trabajado anteriormente, o con gente local que me proponen las instituciones o los espacios que me convocan para hacer la obra. Va modificándose esa logística, pero generalmente trabajo con los chicos.

-L.V.: Entiendo que la logística no debe ser nada fácil.

-E.C.: No, es bastante compleja porque los medios de elevación son complejos, todo el protocolo de permisos es difícil, es trabajo de riesgo, la envergadura de los proyectos es tan grande que conlleva muchas partes, a veces invisibles, en la obra final, pero no sé, desde seguridad e higiene hasta el lugar donde se duerme, todo. Hay muchas cosas que conllevan que el proceso sea engorroso.

-L.V.: ¿Cuánto tiempo calculás que les lleva, por ejemplo, lo que es esto que están haciendo en el Nexus 1?

-E.C.: Bueno, acá estamos en la primera obra, y ya estamos al 70%. Y calculo que vamos a estar 10 días más acá, y se va a poder visitar el proceso para quienes quieran pasar por Belgrano y Santamarina, lo van a poder ver. Pero el tema del viento también es complejo porque, técnicamente, por cuestiones de seguridad y demás, no se puede trabajar con mucho viento, así que hay que preservar antes que nada la seguridad.

-L.V.: Ya habías dejado una marca importante aquí en el Mulen, y ahora vas a dejar dos marcas más que conforman ese tríptico. ¿Estás contento con eso?

-E.C.: Sí, estoy contento, estoy contento. Creo que van a articular bien las obras entre sí, van a ser como una zona, y bueno, después el resto dependerá de ustedes, los espectadores, los transeúntes, los vecinos, que se apropien o se sumen a la conversación que abran estas obras.