El individuo tomó una pequeña caja en la que se iba dejando el dinero y se retiró corriendo. Esa acción fue la que despertó la sospecha de los trabajadores de la YPF, que recién allí advirtieron que algo extraño sucedía.

Así fue como descubrieron el faltante del dinero (no se había determinado el monto) y de inmediato se dio aviso a la policía, que llegó al lugar a los poco minutos y montó un operativo de rastrillaje por las inmediaciones del lugar, también ayudándose con las cámaras del Centro de Monitoreo, aunque al cierre de este edición, no se había informado si se había dado con el paradero del audaz individuo.