El senador provincial -y también secretario de la Federación Gaucha de la provincia de Buenos Aires- Néstor Auza, viajó hasta los pagos de Córdoba para participar del mayor festival de jineteada que tiene el país y recibió el agradecimiento de los competidores bonaerenses que obtuvieron un respaldo oficial para buscar la gloria entre cientos de jinetes de toda Sudamérica. Los tandilenses que siguieron el festival por televisión escucharon de boca del locutor principal, Mario Ezcurdia, parte de los vínculos que, desde la infancia, cultiva el político con el ambiente de las domas y otros eventos de color tradicionalista.
El Campeonato Argentino de Jineteada tuvo sus tres campeones en las diferentes categorías. Ninguno de estos tres fue bonaerense, aunque uno de ellos estuvo en el podio, muy cerca de obtener un primer lugar. Desde hace tres años, Auza acompaña con su presencia, y con la correspondiente gestión, a los jinetes de la provincia de Buenos Aires, al igual que otro tandilense que es “símbolo” en el ambiente de las jineteadas: Jorge Aristegui.
Los jinetes campeones recibieron una rastra en plata con apliques de oro, cinto de Carpincho, plaqueta “al Mérito y Sacrificio” otorgado por Gendarmería Nacional. De la mano de la Municipalidad de Jesús María, se hicieron acreedores de mil pesos, una medalla de plata y un talero entregado por el intendente Marcelino Gatica y fueron distinguidos como Ciudadanos Ilustres de la localidad. Además, cada campeón se hizo acreedor de los siguientes premios, otorgados por las empresas patrocinadoras de la fiesta: una moto, un jamón artesanal, un poncho, un kit de yerba mate y un trofeo.
Artistas de gran experiencia pusieron música al cierre: Argentino Luna, Horacio Banegas, Deolinda, Las Valijas, Jitín Martocchia, Mauro Guiretti y Claudia Armani, Soledad y Natalia Pastorutti.
En el ámbito de la Legislatura, Auza trabaja para la implementación de un seguro médico que cubra a los jinetes en las distintas presentaciones que se hacen en el ámbito de la Provincia, ya sea en las etapas competitivas como en las que no lo son. Ejemplos que refieren a la necesidad de esta herramienta sobran en la zona. Las consecuencias se ven en los hospitales provinciales que reciben a los heridos que no tienen obra social. Pero en Córdoba, su paso no sólo estuvo relacionado a buscar apoyos para esta iniciativa, sino que se extendió a la competencia misma y a los filones culturales que tiene este espectáculo que derrocha tradicionalismo.
Se trata del espectáculo mayor de jineteada que tiene Sudamérica, con un promedio de 20 mil personas que se acercan al estadio Martín Fierro todas las noches, durante 10 jornadas. La recaudación se destina a donaciones para escuelas del interior.
Las delegaciones de jinetes representan a las distintas provincias. Los participantes bonaerenses son tres y surgen de un campeonato que incluye unas 20 jineteadas anuales, supervisadas por la Federación Gaucha de la Provincia cuyo presidente es Jorge Aristegui, el vice, Mario Ezcurdia y el secretario, Néstor Auza. Hace tres años que por iniciativa de este último se obtienen los fondos para premiar a los clasificados para cubrir la estadía en Jesús María. El suceso cobra relevancia en el ambiente ya que ninguna provincia acompaña a sus jinetes de esta forma.