Las últimas semanas de Juan Martín Del Potro han sido muy intensas, como consecuencia de la conquista de la Copa Davis junto al equipo argentino capitaneado por Daniel Orsanic. Este lunes por la tarde, después de la lluvia que había caído en Tandil, muchos se sorprendieron al cruzarse corriendo a Delpo en la zona del Dique.

La tranquilidad de Tandil siempre ha sido uno de los motivos por los cuales el tenista, de 28 años, vuelve constantemente para relajarse, estar con su familia y disfrutar de distintos momentos junto a sus amigos. Sin embargo, esa misma paz le permite poder entrenarse y poder hacer la vida de cualquier persona normal.

Ayer por la tarde mucha gente que salía a realizar distintas actividades físicas se sorprendió al cruzar al imponente deportista, de casi dos metros de altura, que pasadas las 19.30 acompañado por un amigo, trotaba como un tandilense más por la zona del lago.

Con mucha naturalidad, Del Potro saludo a cada uno de los chicos, jóvenes, padres o abuelos que pasaban por el lugar y le mostraban todo su afecto. El ganador del Us Open arribó ayer a Tandil para comenzar con la pretemporada que tiene como principal objetivo llegar de la mejor manera al torneo de Delray Beach, a mediados de febrero, en donde hará la presentación oficial de la temporada.

Seguramente serán muchos los que, en los próximos días, puedan cruzarse a Del Potro por el Dique u otros lugares de la ciudad. En Tandil, Delpo cuenta con la tranquilidad necesaria para encarar una pretemporada que será fundamental para afrontar el circuito internacional.