20 de agosto de 2025
Sufrió hasta el final para imponerse 3-1 a Peñarol. El partido, dramático, estaba casi en la definición por penales. Pero un gol de Pardo, a los 49', desató el delirio en Avellaneda.
Racing, y su vocación ofensiva, tuvieron su premio en el epílogo de un partido dramático. El equipo de Avellaneda superó el golpe del empate parcial uruguayo y en la recta final se impuso 3-1 a Peñarol para meterse en unos cuartos de final en los que enfrentará a Vélez. "Maravilla" Martínez hizo dos, pero el inesperado héroe fue Franco Pardo, autor del tanto de la clasificación con una aparición sorpresiva en el cuarto minuto agregado.
No pudo comenzar mejor el partido para Racing, que salió decidido a arrollar a su rival. A los 3? no faltó mucho para que un defensor visitante le cometiera penal a Adrián Martínez. Y cuatro minutos después "Maravilla" no perdonó. El goleador se anticipó a todos para conectar un balón que le bajó Marcos Rojo de cabeza y puso el 1-0.
Sin embargo, el equipo de Avellaneda evidenció tantas dudas defensivas como determinación. Silvera, en una réplica, exigió a los 13? una gran atajada de Arias. Un minuto más tarde, a la salida de un córner, Nahuel Herrera se elevó sobre una defensa estática e igualó con un gran cabezazo.
Peñarol, después de ese tanto, lució más sereno y peligroso. Pero una adversidad agrandó al equipo local. A los 33?, a instancias del VAR, el árbitro Roldán anuló un gol de cabeza de Marcos Rojo. Tras ese fallo, Racing se pareció al mejor Racing. Desbordó a Peñarol por todas partes y el desnivel rondó varias veces el arco de Cortés antes del descanso.
El ataque total continuó en el complemento. Balboa, de buena actuación, falló a los 5? de cabeza una clara chance de frente al arco.
Peñarol, sin embargo, con su oficio, logró salir del asedio. Y eso que Diego Aguirre eligió sentar a Terans, su atacante más peligroso, para poner un defensor como Milans. Hacia la mitad del complemento el equipo uruguayo logró aquietar el ritmo y controlar el partido durante algunos minutos.
Pero Racing, con más vértigo que fútbol, retomó su ataque en un final dramático y a los 37? Gularte empujó desde atrás en el área a Martínez y Roldán sancionó el penal. "Maravilla" convirtió con un violento remate, puso el 2-1, niveló la eliminatoria y agregó más dramatismo.
En la recta final, Cabrera se perdió el 2-2 en una gran jugada, Martirena el tercero con un violento remate cruzado y Arezo despilfarró la clasificación uruguaya en una doble chance increíble. Y a los 49?, cuando los entrenadores metieron sus cambios para los penales, apareció Pardo por atrás de toda la defensa uruguaya para conectar de cabeza un tiro libre de Martirena y desató la locura en el "Cilindro".
En Brasil, en definición por penales y tras igualar 1-1, San Pablo se impuso 4-3 a Atlético Nacional y también clasificó.
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