27 de diciembre de 2025
Hoy en La Lupa Random, nos preguntamos ¿qué es lo más jugado qué harías por un amigo? Pensalo... y mientras, te contamos la historia de Sandra y Regina, dos amigas que se conocieron en la primaria y compartieron mil momentos. La vida la puso a Sandra frente a una situación compleja de salud y Regi no lo dudó y la ayudó. ¿Cómo?, le donó un riñón para que su amiga esté bien. "No se me ocurre otra cosa, si el otro la está pasando mal, ¿cómo no vas a tratar de hacer algo?"
por
Lorena Medina y Florencia Pendas
Se conocieron en primer grado, pero fortalecieron su vínculo
en un recreo cuando iban a tercero de primaria, "nos invitamos a jugar y de ahí
no nos separamos más". Hicieron toda su trayectoria educativa juntas, convivieron
en tiempos de universidad, con elecciones de carreras distintas, pero juntas.
Sandra Fraifer y Regina Usandizaga, son dos amigas
tandilenses a la que la vida las puso a prueba y como tantas otras veces, se
agarraron fuerte de la mano y llevaron la amistad a otro 'level'.
"Mi situación de salud la tengo hace bastante, pero
estaba controlada. Hace 6 o 7 años la creatinina (función renal) empezó a
deteriorarse un poco, pero lo tenía controlado. En el 2020 tuve Covid, bastante
complicado y de ahí en más la función renal fue empeorando más rápidamente. Tenía
una vida normal, pero los laboratorios me daban pésimo. Ahí fue que mi médico
me dijo que podía hacerme un trasplante preventivo (sin diálisis), me subieron
a la lista del Incucai y fue cuando lo empecé a contar", dije Sandra algunos
días antes del trasplante, ante la atenta mirada de su amiga. Y continúa, "un
día en una cena con 'Las Guapas' (el grupo más numeroso de amigas) conté la situación
del trasplante y Regina dijo 'yo te lo doy'. Muy tranquila, muy serena, muy
segura. Yo me resistía un poco porque clínicamente estaba bien, no veía la diálisis
ni el trasplante. De hecho, me llamaron por varios operativos y por diferentes
motivos no se dio, hasta que empecé a empeorar y ahí Regi se puso más
insistente con que hagamos los estudios. Ella fue la que me impulsó".
"Cuando Sandra contó la situación, dije de ser su donante no impulsivamente. Siempre estuve convencida. En mi casa me apoyaron, mi esposo, mis hijos, mis padres. Todos la quieren mucho, la quieren ver bien y a mí me tienen mucha fe porque soy muy sana," menciona Regina, quien desde su sentido común entiende que donarle a su amiga un riñón, es parte del amor que se tienen, "no es algo grandilocuente", dice.
"Nosotras le damos mucho valor a la amistad, es una
experiencia humana y relación que es súper importante en la vida de las
personas. Entonces vos tenés que hacer cosas por tus amigos, como ellos en
otros momentos hacen por vos y es algo que te nace, no es un deber. No se me
ocurre otra cosa, si el otro la está pasando mal, ¿cómo no vas a tratar de
hacer algo?"
Tan simple y tan complejo como eso. Es estar para el otro
y en este caso, también poner el cuerpo, un acto de amor tan grande como la
amistad que construyeron y que multiplicaron entre sus familias, porque a
partir de esta amistad, sus padres iniciaron una relación de amigos y también
sus hijos.
"Regi muchas veces me agarro de la mano para ayudarme a
salir de otros momentos difíciles y hoy además me da una parte suya, el riñón",
cuenta Sandra con una sonrisa enorme en su cara. Más allá de la situación de
salud, siente una gratitud tan grande que la felicidad la acompaña todo el día.
Las posibilidades de trasplante renal son varias, un
paciente puede recibir un órgano de un donante cadavérico, de un donante vivo
relacionado (pariente) y también de alguien cercano como en el caso de Regina,
sólo que en este último hay que darle intervención a la justicia para que falle
a favor.
"Arrancamos en agosto y la verdad es que los trámites en
la justicia fueron muy rápidos y todos nos trataron de manera muy cuidadosa y
amorosa. Hubo que convocar a testigos para que declaren, pero todo salió muy
bien", cuenta Regina.
En este sentido, lo que hace la justicia es comprobar que
no hay de por medio ningún tipo de interés económico ni transacción alguna, ya
que la donación es un acto altruista y desinteresado.
Lo último que faltaba era la aprobación médica y un último
estudio con el que se determinaba la posibilidad de hacer el procedimiento.
"Cuando empezamos el proceso de compatibilidad, Cecilia,
otra de las amigas, decía 'el universo no puede estar en contra de ustedes' y así
fue los anticuerpos no sólo no se rechazaron, sino que se dieron la mano, se abrazaron",
cuenta Sandra.
Y ahí confirmaron que no sólo habían compartido momentos de vida, algunas tristezas y muchas alegrías, sino que, además, eran compatibles.
"Contar nuestra historia es un poco generar conciencia también
en la comunidad que podemos cambiar la vida de las personas. En el sillón de diálisis
he conocido tantas historias que me parece importante contar que los que
pasamos por esta situación tenemos otras posibilidades de mejorar y que
nuestras amistades, nuestros vínculos cercanos sepan que la opción del donante
vivo existe, es una realidad. En diálisis, me encontré con mucha gente joven,
hay mucha vulnerabilidad psicosocial y en esa situación todo es peor. Personas
que hacen la diálisis y al otro día tiene que ir a trabajar. Les deseo a ellos,
que tengan una Regina en sus vidas. Por eso tenemos que seguir sensibilizando, problematizando,
poniendo el tema en discusión", dice Sandra.
"Yo estoy feliz, con esto hacemos un paso más en nuestro
vínculo que nos conecta con la vida. Regi con este gesto hermoso no sólo me
cambia la historia a mí, sino a mis hijos, a mis hermanas, a mis viejos, a la
gente del trabajo, a todas las personas que me rodean y la rodean. Estoy muy
agradecida y feliz...me siento muy afortunada", afirma.
El trasplante
Cuando Sandra y Regina nos recibieron, faltaban unos días
para el trasplante en el ITAC (Instituto de Trasplantes de Alta Complejidad).
Era jueves y ellas ya viajaban para internarse el domingo y el lunes temprano
ingresaban a quirófano. Sabían todo, el equipo primero haría la cirugía de
Regina y en la camilla de al lado, prepararían a Sandra para concretar el
trasplante. Otra vez y como siempre, juntas. Con una enorme "hinchada"
esperando noticias en el pasillo, porque fueron las familias, Las Guapas y
otros tantos se quedaron acá, atentos al celular.
Todo salió bien, exactamente como lo desearon y
seguramente lo crearon. Una nueva forma de amor nació de esta amistad.
Tantas cartitas que le habrán escrito a Papa Noel, tantos
pedidos que habrán lanzado a las estrellas, pero seguramente, ni en el mayor de
sus deseos existía esta posibilidad de finalmente y de una manera literal, ser
una.
Información sobre donación y trasplantes
En el sitio oficial de Incucai (Instituto Nacional
Central Único Coordinador de Ablación e Implante), el número de pacientes en
lista de espera para un trasplante asciende a 7270. Fueron 2176 los trasplantes
realizados éste año, 939 las personas donantes.
Buscar información en los sitios oficiales, como www.argentina.gob.ar/salud/incucai
nos asegura tener datos fidedignos. Ingresando a este sitio en el apartado
SINTRA podrán encontrar datos por provincia.
En nuestra ciudad también pueden despejar dudas sobre donación
de órganos o para ingresar en el registro de Médula Osea consultando en los
Centros de Salud o en el Hospital Ramón Santamarina.
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