6 de diciembre de 2025
Cuando Joaquín nació el panorama no era el mejor. Pero a fuerza de trabajo y acompañamiento fue superando cada obstáculo que se ponía delante. Hoy, este tandilense de 19 años con síndrome de down llega a La Lupa Random para mostrarnos su emprendimiento de venta de Vinos y Aceites que cada vez gana más clientes. Joaquín Bascougnet y su "salida al mundo".
por
Lorena Medina y Florencia Pendas
El 3 de diciembre es el Día de las personas con
Discapacidad, una jornada que nos invita a reflexionar, informarnos y conocer.
Si bien, con el correr de los años el desarrollo de las personas con discapacidad
ha mejorado teniendo a disposición más herramientas, todavía nos falta mucho
como sociedad.
Se habla mucho de "inclusión", término que, si
utilizamos, es porque ya sabemos que hay personas excluidas, cuando en realidad
todos somos parte de un todo y ese todo no sería lo mismo si alguien faltase.
Para las personas con discapacidad y sus familias el
camino siempre es complejo, en cualquier etapa. Primero la educación, después el
trabajo, siempre el esfuerzo es doble y la necesidad de desplegar estrategias también.
Joaquín Bascougnet es el menor de cuatro hermanos y hace 19
años, su llegada a la vida fue un cimbronazo para sus papás, Carolina y
Mauricio. Es que Joaco tenía síndrome de down y al decir de los médicos venía
con una especie de catálogo con un montón de "no va a poder".
El grupo familiar, encabezado por la mamá trabajó para
que Joaquín sea siempre uno más. Entre los amigos de sus hermanos, en la
escuela, en los deportes y las terapias que lo ayudan a ser más independiente. En
el 2024 Joaquín egresó de Santo Domingo y como todos, empezó a manifestar la necesidad
de "salir al mundo".
"Cuando terminó el secundario, note que le empezó como a molestar pedir dinero para sus cosas. Tiene un amigo que ya estaba trabajando, tenía su sueldo y él quería lo mismo. Salir a tomar algo, comer unas pizzas o hacer algún pic nic. Sentimos que tal vez no estaba preparado para un trabajo convencional, entonces le propuse armar un emprendimiento y ahí empezamos a buscar marcas, precios, etc," cuenta Carolina sobre cómo se gestó el emprendimiento @joaquinvinosaceites.
"Juli, Meli y Caro son el equipo de profesionales que lo
acompañan, este año empezó con una terapista ocupacional para el trabajo con
apoyo. Con ellas se capacita para responder a las preguntas de los clientes, sabe
qué vinos ofrece, cuáles son las cualidades de cada uno. Hay productos orgánicos,
y habla sobre la cadena de producción. Puede hacer sugerencias de acuerdo a la
compra que el cliente quiere hacer. Y después hace los empaquetados", menciona
Carolina.
"Estoy a full con mi emprendimiento, me gusta mucho
conocer gente nueva, tomo los pedidos por instagram y por whatsapp, hago los
paquetes y entrego las compras que me hagan o los vienen a buscar a casa",
cuenta Joaquín.
Esta propuesta de venta de vinos y aceites es más que una
forma de que Joaquín tenga su dinero, para él también es una forma de seguir
aprendiendo de manera constante, desafiarse y desplegar sus habilidades. Pero además,
una de las bodegas tiene productos orgánicos, tiene compromiso con el cuidado
del ambiente y sus etiquetas son obras de artistas con autismo.
"Buscamos varias propuestas pero en Zuccardi, Catena Zapata,
Gran Enemigo - Patron Santiago, encontramos los productos perfectos", dice su
mama quien además no deja de sorprenderse con los avances que se evidencian en Joaquín
en tan poco tiempo del emprendimiento (sólo dos meses).
Joaco además de ser un emprendedor incipiente, es un gran
deportista ahora juega al hockey y va al gimnasio en Uncas, pero practicó fútbol,
básquet, tenis de mesa, siempre tuvo mucha facilidad para eso.
Carolina es una mamá que no sólo se formó para ser la compañía
perfecta para su hijo sino que también impulsa a otras madres a creer en sus
hijos. "Eso es muy importante, hay que acompañar y no asistir. Cuando te
relajas y los dejas ser ellos, es cuando te maravillas, hay que romper con
todos esos mitos de los no va a poder, no va a lograrlo...sacar ese chip y dejar
de creer que son los niños eternos, porque no lo son".
Integra la Asociación Síndrome de down de la república
Argentina (ASDRA) y dentro de ella la Red T21, trabaja en la Mesa de política y
discapacidad, en Tandil Inclusiva. Y siempre es materia dispuesta para el
acompañamiento de familias.
"Yo no quería un hijo que termine las terapias y venga a
casa a tirarse con el celu. Lo mismo que para sus hermanos. Todos fueron
criados igual, con las mismas oportunidades y lineamientos".
Mientras hacíamos la nota, un cliente fue a buscar su
pedido y fuimos testigos de la alegría y el amor que le pone Joaquín a su
emprendimiento. El trabajo es una parte importante de "salir al mundo", como él
mismo dice y la otra, es la social y esa la tiene muy presente. "Tengo un grupo
de amigos, nos juntamos a charlar, a jugar a las cartas, hacemos caminatas, pic
nic", cuenta.
Antes de irnos de su casa, nos despedimos de su mamá mientras
Joaco y su amigo Bosco (que nos hizo el aguante durante casi una hora) se daban
un abrazo. "Así son siempre, ellos tienen mucho amor y nada de maldad", nos
dice Carolina.
Me quedo pensando en eso de la inclusión y en ese abrazo
sin razón aparente más que el amor, tal vez sea eso lo que no entendemos y
excluimos. Ser amorosos, humanos, sin maldad, ni competencia. Eso nos pasa... no
los entendemos, cuánto menos doloroso sería el mundo si todos nos sintiéramos parte
importante de algo más grande. Sin individualidades, ni comparaciones, ni
falsas modestias. Gracias Joaco y familia por mostrarnos todo lo que sí.
Mas info
@joaquinvinosaceites
@tandil_inclusiva
@asdrasindromededown
Para acompañamiento de familias: 2494477338
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