Nicolás Carrillo, concejal mandato cumplido . "Con la reforma laboral nuestros hijos tendrán menos posibilidades de progresar"

En la previa de la marcha de esta tarde en Tandil, en rechazó al proyecto de reforma laboral elevado por el presidente Javier Milei, ahora en manos del Senado, el concejal mandato cumplido Nicolás Carrillo sostuvo que con la reforma laboral, nuestros hijos tendrán menos posibilidades de progresar. Sobre llovido, mojado".

En un posteo de redes sociales, el dirigente hizo un breve resumen de los puntos concretos:

"La ley que propone el gobierno de Milei flexibiliza las vacaciones y permite su fraccionamiento. Introduce un banco de horas: el empleador puede exigir horas extras que no se pagan como tales y luego compensarlas quitando horas en otro momento. Se amplía el período de prueba a seis meses, una medida que beneficia principalmente a las grandes empresas, ya que las pymes en muchos casos ya contaban con esquemas similares.

La indemnización por despido se reduce, porque solo se computa el salario básico, excluyendo aguinaldo y otros ingresos, y además puede pagarse de manera diferida hasta en 12 meses. En un contexto inflacionario, esto implica una licuación directa del monto que corresponde al trabajador.

Se avanza hacia convenios por empresa, quitándole preeminencia a los convenios colectivos por actividad. Esto debilita la posición de los trabajadores, que pasan a negociar de manera individual o en marcos mucho más desiguales. El derecho a huelga se limita y las asambleas en el lugar y horario de trabajo quedan sujetas a la autorización del empleador.

Se eliminan los aportes obligatorios a los sindicatos, volviéndolos optativos, lo que debilita la organización colectiva de los trabajadores. Los trabajadores de plataformas pasan a ser considerados independientes, negando cualquier relación laboral y, con ello, derechos básicos.

Al mismo tiempo, se quitan impuestos a los grandes medios periodísticos. El llamado fondo de cese laboral resulta especialmente polémico: habilita un negocio financiero, incrementa los costos administrativos que cobrarán los bancos y desfinancia a la ANSES, ya que aportes patronales que hoy sostienen el sistema previsional pasarían a alimentar ese fondo".

Finalmente sostuvo que más allá de estas cuestiones técnicas -que claramente perjudican a los trabajadores registrados y los colocan en una situación de mayor debilidad frente a sus empleadores-, "el debate no es sólo sobre una reforma laboral, que ya de por sí es regresiva, sino sobre qué proyecto de país se está construyendo. Existe un reclamo legítimo de pequeños comercios y pymes respecto del actual régimen de despidos, que muchas veces desincentiva la contratación formal. Sin embargo, esta ley no parece orientada a resolver ese problema. Por el contrario, apunta a flexibilizar la relación laboral en beneficio de las grandes empresas, que son las que ya concentran poder económico y capacidad de negociación".

También manifestó Carrillo que "queda como deuda una propuesta seria desde nuestro espacio político que contemple soluciones reales para las pymes, para los trabajadores y para el sector de la economía popular, que hoy sobrevive en condiciones de precariedad. Pero sin un proyecto de país que defienda la industria nacional, el empleo digno y el mercado interno, cualquier medida aislada carece de profundidad y sentido. Hay una línea clara y coherente entre el RIGI y esta reforma laboral: un país pensado desde el extractivismo, proveedor de materias primas, con relaciones laborales cada vez más frágiles.

Con la argumentación de beneficiar a los trabajadores informales, y a pequeñas empresas, este modelo destruye la producción nacional y el consumo , por tanto la reforma solo empeorará las condiciones existentes", aseveró el edil que terminó su mandato el pasado 10 de diciembre.