14 de febrero de 2014
Autores ignorados ingresaron en la madruga de ayer al club Defensores de Belgrano, en calle Pinto 47, tras violentar una reja de una ventana ubicada en la parte posterior de la sede y se alzaron con un plasma que estaba colocado en el buffet del club.
Alberto Daniel Palma culminó la jornada de trabajo cerca de la medianoche del miércoles, sin observar nada anormal cuando se retiró a su domicilio.
Sin embargo al llegar ayer al club se encontró con la desagradable sorpresa sobre que ladrones habían ingresado al lugar y se habían llevado el plasma que había en el buffet. Peralta hizo la denuncia correspondiente y también mencionó que no le habían sustraído dinero ni la computadora y equipo de música que continuaban en el lugar.
Los vecinos escucharon algunos ruidos extraños durante la madrugada pero nadie alcanzó a ver nada. Se estima que el ilícito se habría producido pasada la medianoche, en lo que fue el primer atraco que recibe el barrio en el transcurso de este año.
Ayer por la mañana Alberto Daniel Peralta habló con La Voz y explicó el robo que sufrió durante la madrugada. En diálogo con este medio, informó que “llegué para abrir esta mañana (por ayer) a las 10 y me encontré con este panorama. Me habían robado el plasma que tenemos acá en el club Defensores de Belgrano. Me rompieron la reja y la ventana para entrar y llevarse solamente el plasma”.
“La persona que entró tiene que ser de una contextura muy chica, ya que no creo que una persona normal pueda ingresar por ese lugar ya que la reja tiene muy poco espacio”, sostuvo el encargado de la cantina del lugar. Por otro lado, manifestó que “el miércoles cerré cerca de la medianoche y cuando llegué el jueves a las 10 me encontré con la reja y ventana rotas, además que faltaba el plasma”.
Luego indicó que “no me robaron nada más por suerte, solamente el plasma. Los vecinos no escucharon nada pero me comentaban que vieron a algunas personas merodear por el lugar. Es la primera vez que me toca sufrir un robo acá en el club, luego de más de nueves meses que llevó en la cantina”.
A su vez el damnificado comentó que “el barrio es tranquilo y nunca pasa nada. Lamentablemente esta vez me tocó a mí, pero tenemos que seguir trabajando. Hice la correspondiente denuncia y después la policía tendrá que averiguar sobre este caso”.
En el final, Peralta señaló que “después de este robo no queda otra que meterle para delante. Da mucha impotencia y bronca, pero uno debe seguir trabajando para poder seguir viviendo. Es una lástima que te rompan una reja y la ventana para entrar a robarte”.
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